En el programa televisivo «El diario de Jorge», emitido el pasado 5 de septiembre, se vivió un momento tenso y revelador que puso al descubierto la complicada relación entre Mariem y su hija Nouhaila, así como el esfuerzo fallido de David, el novio de Nouhaila, por ganarse la aprobación de su suegra.
Mariem, al inicio de la emisión, expresó con total sinceridad que las normas y límites que impone en su hogar son inamovibles, situación que provocó que su hija optara por mudarse con su padre para poder vivir su romance con David bajo otros términos. Lo que Mariem creía era una iniciativa de su hija para solucionar estos desencuentros resultó ser un intento de David por acercarse y limar asperezas, sin embargo, este acercamiento no fue bien recibido.
David, en su intervención, trató de desmentir las percepciones negativas que Mariem sostiene sobre él, asegurando que sus intenciones son genuinas y que su futuro lo visualiza junto a Nouhaila. A pesar de sus esfuerzos, Mariem se mantuvo firme en su postura, rechazando la invitación del presentador Jorge Javier Vázquez a confrontar sus diferencias cara a cara en el plató. Mariem destacó su aversión a ser forzada a hacer algo que no nace de su voluntad, incluso bajo la presión televisiva, y declaró su desinterés por conocer más a David, respetando la decisión de su hija de estar con él pero sin querer involucrarse.
La insistencia de Nouhaila por que su madre diera una oportunidad a David y considerara su esfuerzo y el de su padre no fructificó, evidenciando un choque de perspectivas y prioridades. Las palabras de David, buscando una oportunidad para demostrar su sinceridad y buenas intenciones, no lograron ablandar a Mariem, quien cuestionó la importancia de su aprobación en la relación.
El programa se despidió sin el deseado acercamiento, reflejando la determinación de Mariem de mantenerse apartada de la relación de su hija, a pesar de los intentos de mediación por parte del presentador y del propio David. Este episodio en «El diario de Jorge» no solo puso de manifiesto las tensiones familiares y sentimentales implicadas, sino también la compleja dinámica de comunicación y entendimiento entre las partes involucradas.
