Durante el pasado fin de semana, las carreteras de Castilla-La Mancha registraron un total de once accidentes de tráfico, que han resultado en la trágica muerte de una persona y ocho heridos, siendo uno de ellos de carácter grave y los otros siete con lesiones leves. Esta información ha sido proporcionada por la Delegación del Gobierno en la región, que ha compartido el balance correspondiente de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Analizando la situación por provincias, se observa que Albacete no ha reportado ningún accidente. En Ciudad Real se produjo un siniestro que dejó como resultado a una persona herida de forma leve. Por su parte, Cuenca se mantuvo libre de accidentes durante el fin de semana. Guadalajara, en contraste, contabilizó cuatro accidentes, aunque afortunadamente sin heridos. Toledo fue la provincia más afectada, donde ocurrieron seis accidentes que provocaron la muerte de un individuo, además de un herido grave y seis con lesiones leves.
En cuanto a las pruebas de alcoholemia realizadas en la región, se llevaron a cabo un total de 4.803 controles, de los cuales 57 resultaron positivos; entre ellos, cuatro correspondieron a jóvenes menores de 25 años. Desglosando los datos por provincias, Albacete realizó 488 pruebas, de las que cinco dieron positivo, con uno de esos casos en un menor de 25 años. Ciudad Real, con 1.158 pruebas, reportó 18 positivos, incluyendo dos en jóvenes de esa franja de edad. En Guadalajara, de las 704 pruebas realizadas, 11 resultaron positivas, una de ellas en un menor de 25 años. Finalmente, en Toledo se llevaron a cabo 2.453 pruebas, arrojando 23 positivos, sin ningún caso registrado entre menores.
Estos datos resaltan la importancia de la seguridad vial y el consumo responsable de alcohol al volante, especialmente en un periodo donde se incrementan los desplazamientos por diversas razones.
