José Manuel Caballero, presidente de la Diputación de Ciudad Real, acudió este lunes a la romería de San Isidro, el patrón de los agricultores, que se celebró en diversos municipios de la región como fiesta local. El político comenzó su recorrido en Albaladejo donde asistió a la misa oficiada por el párroco en el paraje de la ermita, compartiendo la festividad con los ciudadanos. Caballero destacó la importancia de «recordar nuestras tradiciones agrarias y nuestro compromiso con el campo y el medio rural», además de desear que San Isidro «nos traiga lo que todos tanto anhelamos como es el agua tan necesaria para el campo, el desarrollo y la vida».
El presidente de la Diputación también visitó Cózar, donde los vecinos se encontraban en el paraje de Solance con los preparativos típicos de la comida, tras llegar en procesión con el santo desde su iglesia. Caballero compartió con ellos juegos colectivos y tiró los tradicionales tejos. El siguiente destino fue Villamanrique, donde se sumó a la procesión de vecinos vestidos con los trajes tradicionales de manchegas y recorrieron el municipio desde la iglesia de San Andrés Apóstol hasta el santuario de San Isidro al pie de la sierra, donde multitud de personas esperaban su llegada para asistir a la misa y pedir lluvias.
Caballero felicitó a todos los pueblos que celebran San Isidro y destacó la importancia de que esta festividad suponga un punto de inflexión para los agricultores, para que puedan percibir precios justos por sus productos y sus explotaciones sean rentables. Además, señaló que toda la sociedad debe comprometerse con los agricultores, para que puedan vivir con dignidad. Finalmente, el presidente de la Diputación afirmó que «es importante que los pueblos mantengan sus tradiciones, al ser parte de nuestra identidad y cultura», lo que promueve la permanencia de la población en los pequeños municipios.
