La última gala de «Gran Hermano» ha tenido como protagonista a Violeta Crespo, quien tras una reñida competencia se convirtió en la cuarta clasificada de la edición. Este resultado ha tenido una consecuencia notable: por segundo año consecutivo, la final del reality de Telecinco se queda sin representación femenina, replicando lo ocurrido en «GH Revolution». Los espectadores han dejado claro con sus votos que Óscar Landa, Juan, y Ruvens serán quienes lucharán por el codiciado maletín en la última instancia, relegando a Violeta con apenas el 15% de los apoyos.
Este desenlace se asemeja al de la edición del año 2017, cuando Hugo Sierra se coronó como ganador frente a otros dos hombres, Rubén Valle y Christian Gallardo, que completaron el podio. Sin embargo, cabe destacar que en la historia de «Gran Hermano», ha habido finales dominadas exclusivamente por mujeres, un hito que se ha logrado romper el molde en dos ocasiones notables: «Gran Hermano 8» en 2006 y «GH 15» en 2014, con tríos femeninos ocupando los primeros puestos.
Este fenómeno no solo se ha limitado a las ediciones con concursantes anónimos, sino que también se ha replicado en la versión VIP del concurso. «GH VIP 5» y «GH VIP 7» son ejemplos de esto, donde Alyson Eckmann, Daniela Blume e Irma Soriano, y Adara Molinero, Alba Carrillo y Mila Ximénez, respectivamente, protagonizaron finales exclusivamente femeninas.
Este 19 de diciembre, Óscar Landa, Ruvens y Juan competirán por convertirse en el próximo ganador de «Gran Hermano», marcando apenas la segunda ocasión en que el reality concluye con una final de solo hombres. Este hecho añade un nuevo capítulo a la rica historia del programa producido por Zeppelin TV, que ha visto una diversidad en la composición de sus finales a lo largo de los años, aunque las finales exclusivamente masculinas se mantienen como un evento poco común.