UGT ha alertado recientemente sobre la situación alarmante en el Hospital Universitario de Toledo, tras la reapertura del área de Anatomía Patológica y Bioquímica. Durante el jueves y viernes de esta semana, se han registrado nuevos casos de trabajadores que presentan síntomas de intoxicación, lo que ha generado preocupación entre el personal del centro. Las mediciones realizadas en las instalaciones han vuelto a evidenciar niveles elevados de formaldehído, una sustancia química potencialmente peligrosa.
Inés Pedreño, responsable de Sanidad del sindicato en Toledo, ha expresado su inquietud, indicando que «no pasaron ni 24 horas desde la reapertura de los laboratorios cuando ya estábamos conociendo nuevos casos de intoxicaciones». A pesar de las acciones implementadas por el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) y los controles que se están realizando, Pedreño sostiene que «la realidad está demostrando que todo ello no es suficiente».
Asimismo, ha criticado la percepción que desde la Consejería de Sanidad se está dando a la situación, afirmando que «dan la sensación de que todo está solucionado, pero 48 horas después de reabrir sigue habiendo problemas». Pedreño ha enfatizado la necesidad de priorizar la seguridad de los trabajadores antes de reiniciar la actividad completa de los laboratorios.
UGT Servicios Públicos ha hecho un llamado a la transparencia en la gestión de esta crisis. La organización sindical ha señalado que, a pesar de haber realizado múltiples requerimientos y preguntas al Sescam, muchas de estas quedan sin respuesta. En este contexto, han solicitado que se paralice la actividad en el área afectada hasta que se resuelva la situación.