En un contexto global marcado por tensiones geopolíticas y desafíos en materia de seguridad, el expresidente Donald J. Trump reafirma su compromiso de priorizar la seguridad de los estadounidenses. A través de su enfoque de «paz a través de la fuerza», Trump argumenta que ha cumplido con su promesa de restaurar la seguridad y la estabilidad mundial.

Durante su mandato, Trump se enfocó en la liberación de rehenes estadounidenses, destacando la liberación de seis ciudadanos en Venezuela, dos en Afganistán y otros en diversas circunstancias, sumando un total de 11 rehenes liberados. Este enfoque proactivo se extendió a las negociaciones de paz en Ucrania, donde enfatizó la necesidad de un trato equitativo por parte de Estados Unidos, dado el apoyo financiero considerable que su país ha brindado a la defensa de Ucrania.

El expresidente también se enorgullece de acciones decisivas contra el terrorismo radical, que incluyeron la eliminación de 23 jihadistas desde el inicio de su administración. En una respuesta a las amenazas de Irán, reinstauró políticas de máximo presión, incluyendo sanciones a una red que facilitaba el envío de petróleo iraní a China y la designación de los hutíes respaldados por Irán como organización terrorista.

Trump no se limitó al ámbito militar; también realizó cambios significativos en la política exterior. Una de sus decisiones clave fue el restablecimiento de la Política de Ciudad de México, que restringe el financiamiento a organizaciones extranjeras que promueven el aborto. Asimismo, su administración revirtió las directrices del Departamento de Estado, exigiendo que solo se ondeara la bandera estadounidense en las embajadas, excluyendo otras banderas activistas.

En cuanto a sus esfuerzos por fortalecer las alianzas, Trump ha destacado las visitas de líderes internacionales, incluyendo a los primeros ministros de Japón e India, y al rey de Jordania. Estas reuniones han dado lugar a inversiones sustanciales en Estados Unidos y a promesas de cooperación en áreas como comercio y tecnología.

Por otro lado, el expresidente enfatiza que ha restablecido a las fuerzas armadas de EE. UU. como la más poderosa del mundo, evidenciado por los altos números de reclutamiento del ejército, la marina y la fuerza aérea. Esta revitalización es parte de su visión para reestructurar el liderazgo militar, nombrando al teniente general Dan ‘Razin’ Caine como nuevo presidente del Estado Mayor Conjunto.

El legado de Trump es, sin duda, divisivo, pero él se presenta firme en su narración de un enfoque de política exterior cimentado en la paz y la fortaleza como fórmula para enfrentar los desafíos que el mundo contemporáneo presenta. Su administración, marcada por un retorno a lo que él considera principios fundamentales, busca recuperar el control y la influencia de Estados Unidos en la esfera internacional.

Fuente: WhiteHouse.gov

Scroll al inicio