En una reciente manifestación a través de su plataforma preferida, Truth Social, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó una defensa vehemente contra las críticas lanzadas por la bancada demócrata por su manejo de la relación con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Trump afirmó ser el «único» mandatario estadounidense que no ha cedido territorio de Ucrania a Rusia durante su administración, en un claro ataque a sus detractores y a lo que él describe como «medios de noticias falsas».
Las tensiones entre Washington y Kiev se han intensificado, especialmente tras una interacción tensa en el Despacho Oval el pasado viernes, lo que algunos interpretan como el momento más bajo en las relaciones entre ambos países desde el inicio de la invasión rusa. Frente a estas acusaciones, Trump resaltó su postura, diciendo: «El único presidente que no entregó ni un solo centímetro de la tierra de Ucrania a la Rusia de Putin es el presidente Donald J. Trump. ¡Recordad eso cuando los débiles e inecficaces demócratas me critiquen y los medios de noticias falsas difundan gustosamente cualquier cosa que digan!»
Cabe destacar que, de hecho, ningún presidente de Estados Unidos en la historia reciente ha cedido formalmente territorio ucraniano a Rusia. La política estadounidense ha consistido en apoyar la soberanía e integridad territorial de Ucrania, particularmente evidente desde la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014 durante la administración de Barack Obama, quien trató de aislar diplomáticamente a Moscú e impuso una serie de sanciones.
Esta controversia surge en medio de críticas por parte de prominentes figuras demócratas, tales como Chuck Schumer, líder de la minoría del partido en el Senado, y Hakeem Jeffries, líder de la minoría en la Cámara de Representantes, quienes sostienen que la actitud de Trump sólo sirve para fortalecer la posición de Putin en la región.
Por otro lado, figuras republicanas han cerrado filas alrededor de Trump. El senador Lindsey Graham incluso sugirió que Zelenski podría necesitar dejar el poder como condición para cambiar la dirección de la guerra, una posibilidad que el asesor de Seguridad Nacional de Trump, Michael Waltz, no descartó en una reciente entrevista.
En un ambiente cargado de expectativas, Trump anunció que se dirigirá al Congreso de Estados Unidos en un discurso programado para las 21.00 hora local. Se anticipa que aborde temas críticos como la guerra en Ucrania, el conflicto de Gaza, y sus intenciones de remodelar el papel internacional de Estados Unidos, entre otros asuntos de relevancia nacional e internacional. Con su característica confianza, Trump promete un discurso revelador: «¡MAÑANA POR LA NOCHE SERÁ UN GRAN DÍA! ¡DIRÉ LAS COSAS TAL COMO SON!»
