En una medida que ha capturado la atención tanto de sus partidarios como de críticos, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, promulgó el miércoles una orden ejecutiva que remueve las restricciones establecidas sobre el flujo de agua permitido para los cabezales de ducha. Esta orden, según describió el mandatario, pretende hacer que las duchas en el país «vuelvan a ser geniales», citando preocupaciones personales sobre la eficacia con la que el agua actualmente humedece su cabello como uno de los impulsores de la decisión.
«Me gusta ducharme bien para cuidar mi hermoso cabello… Tengo que estar de pie en la ducha 15 minutos hasta que se moja… Es ridículo,» expresó Trump momentos antes de firmar la orden. La medida ordena al secretario de Energía, Chris Wright, la inmediata rescisión de la norma que, según el presidente, fue excesivamente complejizada durante las administraciones de Barack Obama y Joe Biden. Esta normativa definía estrictamente el término «cabezal de ducha» y limitaba la cantidad de agua que estos dispositivos podían dispensar a no más de nueve litros por minuto. La revocación se tornará efectiva 30 días después de su publicación oficial.
El reclamo de Trump contra estas regulaciones no es nuevo. Durante su primer mandato presidencial (2017-2021) así como en su campaña para la reelección en 2024, el líder republicano se ha manifestado en repetidas ocasiones contra lo que él percibe como restricciones excesivas por parte de administraciones demócratas anteriores, especialmente en lo que concierne a la eficiencia del agua y su impacto en el estilo de vida estadounidense.
Críticos de la administración Trump ven esta medida como un retroceso en los esfuerzos de conservación del agua y protección del medio ambiente, mientras que sus partidarios la aplauden como una victoria por la autonomía personal y contra la regulación excesiva. Este controversial paso subraya una vez más las polarizadas visiones sobre política ambiental y administrativa en Estados Unidos, en un momento en que el debate sobre la sustentabilidad y la preservación de recursos naturales cobra mayor urgencia a nivel mundial.
