Nuevas reglas para la jubilación parcial, activa y demorada
El 1 de abril llega con cambios trascendentales en el sistema de jubilación en España. La Seguridad Social implementará una serie de reformas que modificarán la forma en la que miles de trabajadores acceden a la jubilación parcial, activa y demorada. Estas medidas, impulsadas por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, buscan fomentar la compatibilidad entre el trabajo y la pensión, facilitar el retiro en profesiones de alto riesgo y agilizar el acceso a incentivos económicos para quienes decidan retrasar su jubilación.
Jubilación parcial: mayor flexibilidad y requisitos ajustados
Los cambios en la jubilación parcial brindan más opciones a los trabajadores que desean adelantar su retiro sin dejar de trabajar completamente. Con la posibilidad de anticipar hasta tres años la jubilación parcial con contrato de relevo, reducción de jornada laboral entre un 20% y un 33% si se adelanta más de dos años, y la inclusión de los trabajadores fijos discontinuos en estas modalidades. Adicionalmente, se introduce un nuevo acceso sin relevo para quienes alcancen la edad ordinaria de jubilación, permitiendo una reducción de jornada entre un 25% y un 75%.
Jubilación activa: más incentivos y eliminación de restricciones
En cuanto a la jubilación activa, desaparece el requisito de cotización completa de 38 años y 3 meses (en 2025), facilitando el acceso a más trabajadores. Ahora será posible combinar esta modalidad con los incentivos de la jubilación demorada, además de recibir un mayor porcentaje de compatibilidad de la pensión. Resultando en que, a partir del quinto año, el trabajador pueda recibir el 100% de su pensión mientras sigue en activo.
