Este otoño, la decoración interior y exterior se revitaliza con la incorporación de plantas resistentes que aportan color y belleza durante la temporada. Según expertos en jardinería, las suculentas, las calas y los crisantemos son ideales para enfrentar las fluctuaciones de temperatura mientras ofrecen una paleta vibrante.
Las suculentas destacan por su adaptabilidad a diversas condiciones de luz y su reducido mantenimiento, perfectas para quienes buscan estilo sin complicaciones. Estas plantas ofrecen una variedad de formas y colores, desde verdes intensos hasta morados y rojos, transformando cualquier rincón.
Las calas, por otro lado, aportan sofisticación con sus elegantes flores en forma de trompeta. Resistentes al clima, son perfectas para decorar terrazas o balcones. Mientras tanto, los crisantemos, tradicionales en esta época, llenan los espacios de alegría con sus colores que van del amarillo al púrpura.
Los especialistas recomiendan considerar tanto la estética como el entorno al elegir plantas para la temporada. Una mezcla de estas especies puede crear un ambiente acogedor, ideal para recibir a amigos y familiares.
En un contexto de creciente conciencia por la sostenibilidad, optar por plantas resistentes ayuda a reducir el uso de agua y productos químicos, embelleciendo el entorno de manera responsable.
Así, mientras las hojas caen y la temperatura baja, las plantas resistentes aportan color y vida a los hogares, invitando a disfrutar del otoño. Con creatividad, cada espacio puede transformarse en un refugio lleno de color y alegría.