En un trágico suceso que ha sacudido a la comunidad internacional, la oficina de Médicos del Mundo en la Franja de Gaza fue el blanco de un misil este martes por la mañana, alrededor de las 11:00, dejando un saldo de al menos ocho personas muertas, entre ellos cuatro niños, un adolescente y tres adultos, que se encontraban en la última planta del inmueble al momento del impacto. Este edificio, situado en Deir El Balah, estaba claramente identificado y registrado ante las autoridades militares de Israel, lo que ha suscitado preguntas y preocupaciones sobre las reglas de combate y el respeto a las leyes internacionales que protegen instalaciones humanitarias.
El día del ataque coincidió con el Eid al Adha, conocido como la Fiesta del Sacrificio, una de las principales celebraciones en el Islam, por lo que la mayoría del equipo de Médicos del Mundo no se encontraba en el edificio, evitando así una mayor tragedia. No obstante, la pérdida de vidas ha sido un golpe duro para la organización y las familias de los fallecidos, sobre las cuales aún se tienen pocos detalles.
El centro de Médicos del Mundo en Gaza es conocido como un espacio «deconflicted», término utilizado para describir aquellas ubicaciones protegidas de ataques bajo acuerdos de coordinación humanitaria. Sin embargo, la organización señaló que, como en ocasiones anteriores, no se recibió ningún aviso previo que hubiera permitido tomar medidas para proteger a posibles ocupantes del edificio.
La localidad de Deir El Balah, hasta ahora relativamente ajena a los bombardeos de las fuerzas de Tel Aviv, también alberga a poblaciones desplazadas del norte de la Franja y de Khan Yunis, convirtiéndose en un símbolo de la complejidad y los desafíos de la vida diaria en Gaza. La ofensiva en esta zona se suma a una serie de acciones militares recientes, incluido un ataque contra tiendas de campaña en una escuela de Jan Yunis que cobró la vida de cerca de 18 palestinos, y un incidente con un buque de la iniciativa Flotilla de la Libertad en aguas internacionales cerca de Malta, lo que ha exacerbado aún más las tensiones en la región.
Médicos del Mundo ha condenado enérgicamente el ataque, calificándolo como una grave violación del Derecho Internacional Humanitario. La organización, que trabaja para proveer asistencia médica y apoyo a las comunidades más vulnerables, ha reiterado su compromiso con la población de Gaza a pesar de los riesgos y desafíos que enfrenta.
Este incidente se suma a la creciente lista de ataques contra instalaciones médicas y humanitarias en zonas de conflicto, lo que subraya la urgencia de abordar y prevenir tales violaciones para proteger la vida y la dignidad de las personas afectadas por conflictos en todo el mundo.
