En un trágico suceso cerca de la costa de la isla griega de Kos, en el Egeo oriental, al menos cuatro personas – dos mujeres y dos niños – perdieron la vida después de caer al mar desde una pequeña embarcación que transportaba inmigrantes, debido a una brusca maniobra del piloto. La Guardia Costera de Grecia, que informó del incidente, logró rescatar con vida a otros 27 ocupantes de la nave la noche del martes. La embarcación había partido de Turquía llevando a bordo a los inmigrantes; desafortunadamente, diez de estos pasajeros cayeron al agua durante el incidente, resultando en cuatro fatales bajas.
Este lamentable suceso rememora la crisis del 2015, cuando más de un millón de personas, en su mayoría sirios huyendo de la guerra en su país, llegaron a Grecia en barco desde Turquía. Las autoridades griegas expresan preocupación ante la posibilidad de que esta historia se repita, especialmente a la luz de la reciente ofensiva militar israelí en Líbano y Gaza.
En un esfuerzo por abordar la creciente crisis migratoria, la viceministra griega de Migración, Sofía Voultepsi, subrayó en declaraciones a medios locales la importancia del pacto migratorio que los países de la Unión Europea están discutiendo, el cual se espera entre en vigor en 2026. Voultepsi enfatizó la urgencia de establecer un sistema común de asilo, retorno e integración para gestionar de manera más eficaz el flujo migratorio.
Mientras tanto, en una acción paralela, los primeros 16 migrantes rescatados en el mar por Italia llegaron a Albania. Serán acogidos en dos centros de internamiento establecidos bajo un convenio bilateral, decisión que ha sido criticada por organizaciones no gubernamentales como Médicos Sin Fronteras (MSF). Este acuerdo entre Italia y Albania busca externalizar la gestión de las solicitudes de asilo y la posible repatriación de personas rescatadas, una medida que genera controversia en cuanto a su impacto y eficacia.
En un desarrollo relacionado, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, propuso a los líderes de la Unión Europea la posibilidad de explorar el desarrollo de «centros de retorno» de migrantes ilegales fuera de la UE. Este enfoque busca aprender de experiencias similares, como el acuerdo entre Italia y Albania y otro en funcionamiento entre Reino Unido y Ruanda. Esta propuesta será uno de los diez puntos que Von der Leyen discutirá con los jefes de Estado y de Gobierno de la UE en la cumbre que se llevará a cabo en Bruselas el 17 y 18 de octubre.
La combinación de tragedias y políticas migratorias destaca la complejidad y la urgencia de abordar eficazmente las crisis migratorias y de refugiados en Europa y en todo el mundo. Las autoridades y líderes buscan soluciones equilibradas que respeten los derechos humanos mientras se enfrentan a los desafíos de seguridad y políticas públicas.