Un nutrido grupo de alrededor de 70 personas, identificadas con el sindicato Comisiones Obreras (CCOO), se ha concentrado este martes en protesta frente a las instalaciones de la empresa multinacional japonesa Brahm en Manzanares, Ciudad Real. El motivo de esta concentración ha sido expresar su rechazo a lo que califican de despidos injustificados de dos empleados, uno de los cuales es delegado de la sección sindical de CCOO-Industria en la compañía.
Desde CCOO, se argumenta que los despidos se han llevado a cabo en base a una evaluación subjetiva de rendimientos del personal. Según el sindicato, dicha evaluación se estipula en el convenio colectivo únicamente para fines de promoción y debería servir para reconocer y premiar a los trabajadores más cualificados, y no para sancionar o, en casos extremos, para despedir a los que reciben las puntuaciones más bajas de los evaluadores.
David Vera, secretario general de CCOO-Industria en Ciudad Real, ha manifestado una acusación directa contra la dirección de Brahm, argumentando que hay indicios de motivaciones antisindicales y, de manera más específica, anti-CCOO detrás de estos despidos. Vera relata un historial de presunto acoso laboral dirigido al delegado sindical mencionado, iniciado a raíz de su participación en las elecciones sindicales del año pasado, evento tras el cual ha sufrido sanciones y cambios de puesto que se califican de injustificados.
A este conflicto se suma la discrepancia en cuanto al cálculo de los períodos vacacionales, en la que el delegado de la sección sindical de CCOO habría advertido a la empresa sobre una posible demanda en caso de no alcanzarse un acuerdo favorable a la parte social. Poco tiempo después, se efectuó su despido, vinculándolo a los resultados de la controvertida evaluación mencionada anteriormente.
José Manuel Muñoz, secretario general de CCOO en la provincia de Ciudad Real, ha recordado el reciente logro de representación sindical por parte de CCOO en Brahm y denunció que los despidos tienen conexiones con las maniobras de representación y derechos laborales surgidos durante el proceso electoral. Muñoz también ha criticado a parte del comité de empresa por no unirse a la concentración, señalando que tal actitud atenta contra los principios de los sindicatos.
Finalmente, Ángel León, secretario general de CCOO-Industria en Castilla-La Mancha, ha enviado un mensaje claro a la dirección de Brahm, advirtiendo de la firmeza del sindicato frente a lo que consideran ataques a sus representantes, sellando su mensaje con la frase: «Si nos tocan a uno, nos tocan a todos».
El sindicato, por tanto, está exigiendo la inmediata readmisión de los trabajadores afectados y asegura defender los derechos fundamentales de los representantes de los trabajadores y trabajadoras.
