Los trabajadores de FCC, la concesionaria del servicio de recogida de basuras de Cuenca, han llevado a cabo una concentración a las puertas del Ayuntamiento de la capital como último aviso antes de la huelga de limpieza que está planeada durante las próximas fiestas de San Mateo. Esta medida se llevará a cabo en caso de que no haya acuerdo con la empresa. A pesar de esto, confían en que el Ayuntamiento no establezca unos servicios mínimos excesivos en caso de que no se pueda evitar el paro.
La demanda de los trabajadores de la concesionaria se centra únicamente en poder cobrar el Salario Mínimo Interprofesional, como ha recordado el presidente del Comité de Empresa, Félix Peñaranda, durante la concentración. La huelga está planeada para llevarse a cabo del 18 al 24 de septiembre, coincidiendo con la festividad de San Mateo. Peñaranda ha dejado claro que se desconvocará en el momento en que se comprometan a pagarles el SMI, ya que no desean otra cosa. A pesar de esto, lamenta el perjuicio que se causará a los habitantes de Cuenca, pero considera que es la única manera de hacer que se les escuche.
Cuando le preguntaron acerca de las diferencias entre su situación y la de los trabajadores del servicio de Tarancón, que también pertenecen a la misma concesionaria y evitaron la huelga en el último momento durante las fiestas de esa localidad, Peñaranda explicó que en su caso se trató de la negociación de un nuevo convenio, mientras que ellos solo reclaman el SMI. Además, ha revelado que los trabajadores de FCC en Tarancón tienen mejores condiciones que los de Cuenca capital, siendo ésta una de las concesiones peor remuneradas de la empresa.
Por último, el Comité de Empresa ha destacado que no ha habido un acuerdo para determinar los servicios mínimos de la huelga en la capital, por lo cual será el Ayuntamiento quien tenga que tomar esa decisión. En ese sentido, esperan que se comporten adecuadamente y no establezcan unos servicios mínimos excesivos, ya que si dicen estar del lado de los trabajadores, deberán demostrarlo.
El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, bajó a los arcos del Ayuntamiento para hablar con los manifestantes y les transmitió que su protesta debería ser llevada a cabo en las instalaciones de la empresa, ya que desde el Consistorio no pueden solucionar directamente su demanda de aumento del SMI.