El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha realizado una visita este lunes a las riberas del río Tajo en la senda ecológica, donde ha podido comprobar los efectos de la crecida del caudal de agua de las últimas semanas. Esta situación ha sido provocada por las intensas lluvias del mes de marzo y el desembalse de agua de los pantanos de cabecera. Durante su recorrido, Velázquez ha anunciado que el Consistorio toledano se unirá a la petición del Gobierno regional para declarar la zona como catastrófica debido a los daños ocasionados por las lluvias recientes.
El alcalde ha señalado que los «daños evidentes» en la región todavía no han podido ser cuantificados en su totalidad, dado que el río continúa por encima del nivel de caudal habitual. En este sentido, Velázquez ha destacado la gravedad de la situación en Toledo, que, sin duda, ha sido una de las áreas más afectadas en la región, y ha expresado la necesidad de que se solicite formalmente la declaración de zona catastrófica.
Asimismo, ha transmitido su preocupación por el estado de la senda ecológica, que ha sufrido daños significativos en varios tramos. En respuesta a esta crisis, el Ayuntamiento hará todo lo posible para restaurar la normalidad en la zona lo antes posible. Velázquez ha recordado que en algunas áreas de la senda se había llevado a cabo una importante inversión para rehabilitar la ribera del río, incluyendo sectores cercanos a la Universidad, el puente de la Cava y el barco de pasaje en la Casa del Diamantista. Ante esta situación, se planea reunirse con la empresa adjudicataria para evaluar los daños y determinar los pasos a seguir en la recuperación de la zona.
