El concejal de Hacienda, Fondos Europeos y Participación Ciudadana, Juan José Alcalde, ha presentado este miércoles el proyecto de acondicionamiento del margen derecho del río Tajo a su paso por el Casco Histórico. Esta iniciativa busca dar continuidad desde el puente nuevo de Alcántara hasta los molinos de Daicán y se enmarca dentro de los planes de sostenibilidad turística en destino, incluidos en el Plan Territorial de Sostenibilidad Turística de Castilla-La Mancha, parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por la Unión Europea con fondos Next Generation.
Las obras han sido adjudicadas a la empresa Trento Arquitectura SL y tienen un plazo de ejecución de 6 meses, con un costo de 412.945,45 euros para una superficie total de 15.453,72 metros cuadrados, según ha informado el Ayuntamiento en una nota de prensa.
El objetivo del proyecto es promover el fomento y desarrollo del patrimonio cultural y natural de la zona, mejorando de manera duradera la situación económica de la ciudad al generar actividad de ocio, cultural y hostelera. Además, se busca mejorar el entorno medioambiental mediante la recuperación de las riberas y la incorporación de vegetación autóctona.
Según indicó Alcalde, el margen derecho del río Tajo en el Casco Histórico está compuesto por una serie de caminos, bancales, praderas y equipamiento urbano que datan de los años noventa. Este paisaje natural, con vegetación de ribera, se adapta a las edificaciones industriales de azudes y molinos que actualmente se encuentran en desuso.
Las actuaciones del proyecto se centrarán en la naturalización, iluminación, abastecimiento y accesibilidad del área. Se llevará a cabo el corte y retirada de vegetación superficial seca, la poda de plantas, y el refuerzo de taludes para estabilizarlos. También se instalará una nueva línea de alimentación para el alumbrado público y se colocarán nuevas farolas, sustituyendo las que no están operativas y reparando aquellas que lo necesiten.
Un aspecto destacado por el concejal es que el camino existente será reparado con un pavimento de granito natural antideslizante, manteniendo las pendientes mínimas para garantizar la accesibilidad. Se realizará una nueva escalera en la plaza del Diamantista para continuar la senda, cumpliendo con los estándares del Código de Accesibilidad de Castilla-La Mancha y el Documento Básico de Seguridad de Utilización del Código Técnico de la Edificación, asegurando así que la obra sea completamente accesible.
