El Casco Histórico de Toledo se encuentra en el proceso de alcanzar un 60 por ciento de implantación del sistema de bolseo, gracias al inicio inminente de la novena fase de este proyecto, que ya abarca 99 calles y 135 contenedores. Loreto Molina, concejal de Obras y Servicios, ha detallado en rueda de prensa las principales calles donde se comenzará el desarrollo del bolseo, entre las que se incluyen la calle de Trinidad, el Paseo de San Cristóbal, la calle de San Miguel de Los Ángeles, la Plaza del Conde, la calle Descalzos, la Plaza del Calvario y la Plaza de San Cipriano.
Para llevar a cabo esta iniciativa, Molina tiene prevista una visita nocturna a las calles mencionadas, acompañada por miembros de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo, así como representantes de la empresa encargada del servicio. Tras realizar un primer análisis y constatar que no hay inconvenientes, se iniciará la operación de forma rápida.
Además, se incluyen en este plan la Plaza del Andaque y la Plaza de San Justo, aunque en estas ya se ha realizado la implantación, ya que se han llevado a cabo pruebas por ser «calles muy estrechas». En total, se instalarán seis contenedores de 800 litros y ocho de 240 litros, distribuidos específicamente según las necesidades de cada área.
Molina ha destacado que se inicia una nueva fase del bolseo, recordando que las fases anteriores han funcionado con normalidad. A pesar de los avances, ha señalado que el desarrollo se realiza de manera detallada para evitar cualquier aspecto pendiente. Algunas zonas, como la plaza de la Magdalena y el cobertizo de San Miguel, todavía no cuentan con este sistema debido a las dificultades que presentan tanto para instalar los contenedores como para vaciarlos.
En cuanto a la respuesta de los vecinos en las áreas donde el bolseo ya se ha implementado, la edil la ha calificado de muy buena, un aspecto que también ha sido corroborado por la empresa encargada del proyecto. Se han observado mejoras en cuestiones como el olor y el ruido visual.
Respecto al incumplimiento de la medida, Molina ha afirmado que la mayoría de los ciudadanos son cívicos y que, aunque existen algunas personas que dejan las bolsas fuera, no se pueden imponer sanciones en este momento, ya que se trata de un proyecto piloto. Sin embargo, ha indicado que sí sería posible sancionar a quienes incumplan el horario establecido en los tramos de recogida, de acuerdo con la ordenanza municipal.
Finalmente, espera que el servicio de bolseo esté completamente implantado al final de la legislatura, con la confianza de que se logren los objetivos planteados.