El aeropuerto de Charleroi, situado en Bélgica, ha quedado completamente paralizado tras una alarma generada por una alerta de bomba en un vuelo proveniente de Oporto, Portugal. Este incidente ha llevado a la suspensión indefinida de todas las operaciones de llegadas y salidas en el segundo aeropuerto más concurrido de Bélgica. El vuelo afectado, con 166 pasajeros a bordo, aterrizó en Charleroi a las 10:56 horas sin contratiempos pero fue inmediatamente evacuado y colocado en un área segura, lejos de las operaciones habituales del aeropuerto.
Nathalie Pierard, portavoz del aeropuerto de Bruselas Sur Charleroi, confirmó que se estableció un perímetro de seguridad de 500 metros alrededor del avión, mientras que la policía tomó control de la situación. Por el momento, se espera que los pasajeros sean evacuados de forma segura, siguiendo las indicaciones de las autoridades de seguridad.
Este incidente ha generado importantes retrasos y desvíos en los vuelos programados para las próximas horas, afectando a una amplia gama de destinos. La única pista de aterrizaje y despegue del aeropuerto se ha cerrado, obligando a muchos vuelos a ser redirigidos hacia otros aeropuertos, incluyendo el principal aeropuerto de Bruselas y Lille, en Francia. A pesar del cierre de las operaciones de vuelo, la terminal del aeropuerto de Charleroi permanece abierta para atender a los pasajeros afectados y proporcionarles la asistencia necesaria.
Entre los vuelos afectados se encuentran aquellos procedentes de Vitoria y Lanzarote, así como varias salidas programadas hacia destinos populares como Barcelona o Palma de Mallorca, que han tenido que ser retrasadas de manera indefinida debido a la alerta de seguridad.
Este incidente subraya la importancia de la seguridad aeroportuaria y los protocolos establecidos para manejar situaciones de emergencia como ésta. Mientras las autoridades trabajan para resolver la situación de la manera más rápida y segura posible, los pasajeros y personal del aeropuerto se ven obligados a adaptarse a una situación inesperadamente tensa y llena de incertidumbre.
