Cristina Maestre, portavoz del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en Castilla-La Mancha, ha hecho pública la postura de su formación de no deslegitimar a los gobiernos locales de la región, incluso cuando estos son dirigidos por la suma de fuerzas entre el Partido Popular (PP) y Vox. Estas declaraciones se realizan en un contexto donde ambas formaciones políticas se han consolidado como la segunda y tercera fuerza política en la región, respectivamente.
Durante una entrevista con Europa Press, Maestre ha solicitado a PP y Vox que reconozcan de la misma forma al Gobierno de Pedro Sánchez en el ámbito nacional. Maestre argumenta que un gesto de tal naturaleza es parte de la acción institucional que debe primar en todos los niveles, donde es esencial «hablar con todo el mundo y dar legitimidad a quienes están» al frente de las instituciones, «aunque hayan perdido las elecciones».
La portavoz del PSOE castellanomanchego ha subrayado que su partido no deslegitima a los gobiernos locales que se han formado a partir de la unión de PP y Vox, incluso cuando dicha coalición no resultó ganadora en los comicios. Tal es el caso en Castilla-La Mancha, donde, según Maestre, el presidente Emiliano García-Page ha demostrado la capacidad de trabajar con representantes de todos los niveles institucionales durante el primer semestre del año.
Maestre ha aprovechado para realizar un balance electoral del PSOE en la región, destacando el resultado de las elecciones autonómicas, en las que el partido consiguió una mayoría absoluta. A pesar de las derrotas del PSOE en otras regiones, en Castilla-La Mancha los socialistas se consideran reforzados y se establecen como un referente a nivel nacional, según la portavoz.
En este contexto regional de fortaleza, reconoce diferencias de opinión entre el presidente castellanomanchego, Emiliano García-Page, y el líder nacional del PSOE, Pedro Sánchez. No obstante, enfatiza que tales divergencias no interpelan a la militancia a posicionarse entre ser «sanchista» o «pagista». Maestre recalca la legitimidad democrática de ambos líderes y descarta la necesidad de dividir al partido en base a sus opiniones diversas.
Cristina Maestre concluye su intervención subrayando los resultados positivos obtenidos en las autonomías como reflejo del apoyo a la gestión socialista en la región, diferenciándola de otras zonas donde el poder compartido entre PP y Vox podría significar retrocesos y recortes en la administración.
