En 1980, el mundo cinematográfico se estremeció con el lanzamiento de una de las películas más icónicas en el género de terror y suspense: «El resplandor». Esta obra maestra dirigida por Stanley Kubrick, basada en la novela homónima de Stephen King, se ha convertido en un clásico indiscutible del cine y ha dejado una marca indeleble en la cultura popular. Con un idioma original en inglés, la película sumerge a la audiencia en una atmósfera de tensión psicológica, misterio y terror sobrenatural que apenas ha disminuido a lo largo de los años.

La trama se centra en Jack Torrance, interpretado magistralmente por Jack Nicholson, quien se traslada junto con su esposa Wendy, encarnada por Shelley Duvall, y su hijo Danny, papel llevado a cabo por Danny Lloyd, al aislado hotel Overlook para ocupar el puesto de cuidador durante la temporada de invierno. Lo que comienza como una oportunidad para la tranquilidad y el trabajo, pronto se convierte en una espiral de locura y horror, especialmente cuando Danny revela tener capacidades psíquicas conocidas como «el resplandor», que le permiten percibir los oscuros secretos del hotel.

La dirección de Kubrick es impecable, tejiendo una narrativa visual que combina una meticulosa atención al detalle con una innovadora técnica cinematográfica. La duración de la película es de aproximadamente 146 minutos en su versión extendida, ofreciendo así al espectador una experiencia inmersiva y profundamente perturbadora. La música, a cargo de Wendy Carlos y Rachel Elkind, añade una capa adicional de tensión, destacando la escalofriante atmósfera que envuelve al hotel y sus ocupantes.

«El resplandor» no solo destaca por sus actuaciones principales, Nicholson en particular recibe elogios por su desempeño como Jack Torrance, cuya gradual descensión hacia la locura es tanto convincente como aterradora. La interpretación de Duvall como Wendy también es digna de mención, presentando una mezcla emocional de fortaleza y vulnerabilidad. Por su parte, Lloyd, a pesar de ser un actor tan joven en aquel entonces, realiza una actuación memorable que contribuye enormemente al inquietante tono de la película.

Desde su lanzamiento, «El resplandor» ha sido objeto de diversas interpretaciones y teorías que buscan explicar sus simbolismos, ambigüedades y la intención detrás de ciertas elecciones creativas de Kubrick. Este interés perdurable es testimonio de la riqueza y complejidad de la película, convirtiéndola en objeto de estudio y admiración dentro de cursos de cine y literatura de horror.

A pesar de la inicial división de opiniones entre críticos y el mismo Stephen King sobre la adaptación de su novela, «El resplandor» ha envejecido como un buen vino, ganando una apreciación casi universal y consolidándose no solo como uno de los mejores trabajos de Kubrick, sino también como uno de los pilares del horror en el séptimo arte. Su legado continúa influyendo en nuevas generaciones de cineastas y amantes del género de terror, asegurando que el resplandor del Overlook permanezca brillando por muchos años más.

Scroll al inicio