
García-Page destacó la calidad democrática de España y lamentó el “mercado territorial” en que se convirtió el Congreso
“No voy a permitir que nos amarguen la fiesta”. Así de rotundo fue el comienzo del discurso del presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en el marco de su intervención por la celebración del 41 aniversario de la Constitución Española, que se llevó adelante en el Parlamento autonómico. García-Page aprovechó la efeméride para resaltar la calidad democrática