El Movimiento Sumar en Castilla-La Mancha ha expresado este viernes la necesidad de establecer un «nuevo marco de relación» con el Partido Socialista, en un contexto de crisis interna que ha llevado a la dimisión del secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, y a la reconfiguración anunciada por Pedro Sánchez de la ejecutiva del partido. Jesús Plaza, coordinador del Movimiento Sumar en la región, junto a María Rodríguez, ha señalado que esta nueva relación debe ser de «tú a tú, con respeto y coherencia».
Plaza ha advertido que una alternativa al actual gobierno de coalición podría suponer un «retroceso en lo social», instando a que se continúe y se fortalezcan las acciones sociales dentro del Ejecutivo conjunto. Además, ha lamentado la situación en el PSOE y ha subrayado la necesidad de que los socialistas actúen de manera contundente, manteniéndose el Movimiento Sumar atento a las decisiones que se tomen en el seno del partido.
El coordinador también ha enfatizado el impacto negativo que estos acontecimientos han generado en el ámbito político progresista a nivel nacional, considerando incoherente que se produzcan situaciones de corrupción que no se alinean con el «ADN de la izquierda progresista». Sin embargo, ha exigido que, respecto a los ministros de Sumar, no reciban admoniciones por las acciones de otros, y que lo relevante sea su contribución al bienestar social.
En otro orden de cosas, Plaza ha abordado la postura del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, respecto a la dirección nacional del PSOE, considerándola un «tema interno» de su partido, aunque ha destacado que no es raro que Page critique a su propia formación. Aun así, ha calificado de «no oportuno» el rechazo al Plan Estatal de Vivienda propuesto por el Gobierno de España, señalando la urgencia que representa el acceso a la vivienda como un derecho fundamental en la región.