Tras una intensa negociación entre los sindicatos del Comité de Empresa de Atento Toledo y la dirección de la firma, se ha llegado a un acuerdo que los representantes sindicales consideran «menos lesivo» que lo que inicialmente pretendía la empresa, aunque reconocen que «no es el acuerdo esperado».
El Comité de Empresa ha informado que el entendimiento alcanzado permitirá que 26 de sus trabajadores puedan ejercer su labor en modo de teletrabajo vinculados al Centro de Madrid, con la condición de llevar a cabo 3 turnos físicos en el centro, esto se mantendrá hasta que el cliente lo requiera. Esta medida modifica los planes originales de la compañía que proyectaba el traslado de 134 empleados del centro de Toledo a Madrid.
El proceso de negociación, que comenzó con la instalación de la Mesa de Negociación el 1 de julio, llevó a las partes a desarrollar una serie de encuentros, culminando con la firma del Acuerdo este miércoles.
El acuerdo estipula tanto la opción de teletrabajo para una fracción de la plantilla, concretamente el 85% del tiempo laboral mensual, como la posibilidad de desplazamiento geográfico hasta Madrid para los colaboradores toledanos inicialmente afectados.
Los sindicatos, sin embargo, han expresado su descontento con la movilidad geográfica, señalando como inaceptable esta condición, a la luz de que la plantilla es mayoritariamente femenina y muchas de estas trabajadoras tienen responsabilidades familiares que resultan incompatibles con tal traslado.
Una fuente adicional de inquietud para el Comité es que el arreglo de teletrabajo firmado tiene una vigencia de un año, dejando en incertidumbre el futuro laboral a largo plazo. De llegar a cambiarse las condiciones antes de concluirse dicho período, la compensación por cese de empleo se reduciría substancialmente, pasando de 30 días por año laborado y 14 mensualidades, a 20 días y 12 mensualidades, lo que supone un escenario de riesgo de desempleo para las 26 personas implicadas.
Los sindicatos relatan que hay una sensación de indignación entre los trabajadores del centro de Atento Toledo. La propuesta de la empresa es percibida como un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) oculto que dejaría sin empleo a individuos con más de 15 años de antigüedad en la empresa y sin garantías confiables de recolocación. Dicha recolocación fue uno de los temas clave abordados en las reuniones con representantes de grupos políticos, el Ayuntamiento de Toledo y la Junta.
