El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, está convencido de que, sin importar quién gane las elecciones del 23 de julio, el tren convencional no volverá a circular. Incluso recordó que, sin importar lo que suceda en dichos comicios, será necesario esperar la sentencia definitiva del Tribunal Supremo sobre el futuro del tramo ferroviario Cuenca-Utiel.
Dolz se preguntó: «¿Y mientras tanto qué hacemos? ¿Mantenemos ese foco de inmundicia e incendios durante no se sabe cuánto tiempo?». Según el alcalde de Cuenca, en las elecciones municipales y autonómicas, el Plan X Cuenca fue respaldado en trece de los quince municipios por los que pasa la línea. Sin embargo, ahora se está viendo una parálisis política en relación con este proyecto de integración del espacio ferroviario en la ciudad.
La decisión cautelar del Supremo de restituir el tramo ferroviario fue considerada por Dolz como un «jarro de agua fría». Explicó que, para que el tren regrese, se deben adecuar las vías y electrificarlas con fondos europeos. Aunque el Partido Popular afirma que ese tren ya no es viable, Dolz reta a que, si su compromiso electoral es restituir la línea, lo hagan y asuman los costos para adecuar las vías después de los daños causados por el temporal Filomena.
Durante su visita a las escuelas municipales de verano, el alcalde señaló que están analizando con la Abogacía del Estado qué acciones se pueden llevar a cabo en los terrenos después de la suspensión cautelar. En este sentido, cree que podrían construirse aparcamientos siempre que no se toquen las vías, como indica la medida cautelar, aunque están a la espera de la interpretación que se dará a la resolución.