En el Día Mundial de la Arquitectura, que se conmemora este lunes 7 de octubre, la decana del Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha, Elena Guijarro, ha puesto de manifiesto la necesidad de abogar por «una arquitectura más sencilla, más doméstica, que utilice recursos propios de cada entorno». En sus declaraciones a Europa Press, Guijarro subrayó la importancia de adoptar soluciones constructivas más reutilizables que contribuyan a la sostenibilidad de las edificaciones, en alineación con los nuevos retos que enfrenta la arquitectura, tales como el cambio climático, el desarrollo sostenible y la circularidad.
En el contexto de esta celebración, Guijarro ha enfatizado que «ahora más que hacer alardes de arquitectura, lo que proponemos es una arquitectura más sencilla». Este cambio de paradigma requiere de un esfuerzo de concienciación social, especialmente entre las nuevas generaciones de arquitectos, a quienes se les debe ofrecer la oportunidad de mostrar su capacidad para abordar estos desafíos.
El lema de este año, «Proyectamos el futuro ahora», fue elegido por el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España (Cscae) a partir de un manifiesto de la Unión Internacional de Arquitectos (UIA). Con este lema, los arquitectos buscan resaltar los valores fundamentales de la profesión y su compromiso para ofrecer soluciones innovadoras y sostenibles a problemáticas como el calentamiento global y la escasez de vivienda asequible.
Guijarro también ha citado la importancia de las oficinas de rehabilitación, que facilitan el trabajo en la modernización del parque edificatorio existente, con un enfoque en la mejora de la eficiencia energética en edificios que actualmente presentan deficiencias. Alrededor del 50% del parque edificado está destinado a ser rehabilitado, y el objetivo se centra en eliminar el uso de calefacciones a base de gasóleo y combustibles fósiles en favor de materiales más sostenibles y de fácil acceso.
La decana ha insistido en que se necesita una compensación adecuada que permita a los arquitectos ofrecer un trabajo de calidad, pues los honorarios han sido significativamente degradados en los años posteriores a la crisis. En este contexto, el Cscae ha destacado que aproximadamente el 60% de los edificios existentes requieren una rehabilitación energética, además de otras mejoras necesarias en accesibilidad y funcionalidad.
La presidenta del Cscae, Marta Vall-llossera, ha señalado que el reto es colectivo y requiere de acciones que involucren a la población, assim como un diagnóstico preciso para que las transformaciones urbanas se adapten a las necesidades de cada comunidad.
Las actividades programadas en Castilla-La Mancha incluyen la lectura de la Declaración del Cscae, mesas redondas sobre la situación de la profesión y talleres sobre Fotogrametría y Realidad Virtual, así como la celebración de conferencias y exposiciones en diversas ciudades de la región. Estos eventos buscan fomentar el diálogo y la reflexión sobre el futuro de la arquitectura y su impacto en la sociedad.