La figura de Terelu Campos continúa siendo un foco de atención en el ámbito mediático de España. Su participación en el programa de supervivencia «Supervivientes» es solo una arista más en la multifacética presencia de la mediática en los medios de comunicación del país. María Patiño, al frente de «Ni que fuéramos Shhh» en la cadena Ten, no ha dejado de analizar y comentar las vivencias y transformaciones de quien fuera su compañera en Telecinco.
María Patiño ha puesto de relieve la evolución personal y profesional de Terelu Campos a lo largo de los últimos años, destacando un cambio significativo en su forma de afrontar la vida y su carrera en la televisión. Según Patiño, el punto de inflexión se dio con la propuesta de una entrevista a Miriam Sánchez por parte de la dirección del programa «Deluxe», un momento que representó para Terelu una especie de liberación de prejuicios y el comienzo de una nueva etapa en la que su personalidad ha brillado con luz propia.
Uno de los momentos que aún genera expectación y debate es la posibilidad de un encuentro televisivo entre Terelu Campos y Pipi Estrada, con quien mantuvo una relación sentimental marcada por la controversia. La televisión, siempre ávida de momentos de alta tensión emocional y enfrentamientos dialécticos, podría ser el escenario ideal para este cara a cara. Y aunque algunos, como Javier de Hoyos, dudan que Terelu decida cruzar esa línea, para María Patiño, todo dependerá de las circunstancias y las decisiones personales, siempre dentro del marco de lo que la televisión, en su búsqueda constante por el entretenimiento, pueda propiciar.
La relación entre Terelu Campos y Pipi Estrada, con su historial de conflictos, demandas y momentos tensos ante las cámaras, sigue siendo un tema de interés para la prensa y el público, alimentando así las especulaciones sobre futuros encuentros mediáticos entre ambos. El tiempo dirá si estos anticipados cara a cara se materializarán, cerrando o abriendo un nuevo capítulo en la ya de por sí rica crónica de la prensa rosa española.