La planta de Vestas en Daimiel ha experimentado por segundo día consecutivo una paralización total de su producción debido a la adhesión masiva al paro convocado por los trabajadores. La respuesta ha sido contundente a pesar de los intentos de la empresa por generar divisiones internas y tensar el ambiente laboral. La plantilla se ha mantenido unida y firme en la defensa de sus derechos, buscando mejoras en sus condiciones de trabajo.
El éxito del paro refleja un claro descontento entre los empleados, quienes se han mostrado decididos a continuar con sus reivindicaciones. Esta situación plantea un reto significativo para la dirección de Vestas, que ahora enfrenta la necesidad de abordar estas preocupaciones de manera efectiva para restaurar la normalidad en la producción. Mientras tanto, la situación en Daimiel continúa siendo monitorizada de cerca tanto por la empresa como por los trabajadores, quienes esperan alcanzar un acuerdo beneficioso para ambas partes.
Fuente: CCOO Castilla-La Mancha