La reciente aparición de Scottie Pippen en La revuelta dejó a todos los presentes con la boca abierta. David Broncano, conocido por su humor y sus incisivas preguntas, se encontró en un pequeño aprieto al intentar plantear una de sus preguntas típicas, la que todos esperan en el programa. Con un poco de inseguridad, Broncano se preparó para formular su incómoda pregunta en inglés: «¿Cuántas veces has tenido sexo en los últimos treinta días?».
Lo sorprendente fue la reacción del exjugador de baloncesto. Sin titubeos y casi desafiando al presentador, Pippen le pidió que le hiciera la pregunta directamente. «33», soltó con una franqueza y claridad que dejó a Broncano en estado de shock. La audiencia, que había incitado a su respuesta, estalló en risas y aplausos ante la sinceridad del deportista.
El número mencionado no era casual. El dorsal del legendario jugador de la NBA, el 33, estaba presente en una camiseta que había aparecido durante el programa, lo que hizo que su potente respuesta adquiriera aún más significado. ¿Había Pippen usado ese número estratégicamente para añadir humor a la situación, o realmente había estado activo en su vida íntima? La duda quedó flotando en el aire, creando un momento memorable para la audiencia.
Desde la cuenta oficial del programa en redes sociales, compartieron su admiración por la audacia de Pippen, destacando que «no le habían contado qué eran las Preguntas Clásicas» y, aun así, había entregado una de las respuestas más memorables de la historia del programa. La capacidad del exjugador para captar el humor del momento mostró que, además de un magnífico deportista, era un gran comunicador, capaz de interactuar de manera natural con el público.
En un mundo donde muchas personalidades prefieren cuidarse de sus palabras, la honestidad de Pippen refrescó el ambiente, recordando a todos que a veces, una respuesta sincera y hasta juguetona puede convertirse en el oro televisivo que todos buscan. Así, La revuelta volvió a dar en el clavo, creando un instante que seguramente será recordado por mucho tiempo.