A pesar de que el BM Caserío ocupa actualmente la tercera plaza en la División de Honor Plata, un lugar que puede parecer decepcionante después de haber liderado la clasificación durante gran parte de la temporada, el equipo se encuentra en la lucha por el ascenso. Las caídas en partidos cruciales en Alicante, Burgos y Sevilla han dificultado sus posibilidades de un ascenso directo, pero la oportunidad de finalizar en segundo lugar y organizar la fase de ascenso sigue latente, lo que les permite soñar con el objetivo de llegar a Asobal en el Quijote Arena.
El entrenador del equipo mantiene un enfoque positivo a pesar de las adversidades y destaca la importancia de los logros obtenidos a lo largo de la temporada. Reconoce que el equipo debe aprovechar la última jornada para intentar quedar segundo, lo que les permitiría jugar la fase de acceso a Asobal en casa. Los jugadores son conscientes de que no dependen totalmente de sí mismos para lograr su objetivo, pero se comprometen a dar lo mejor en su próximo partido, esperando resultados favorables de otros equipos.
En el cierre de la fase regular, el BM Caserío se enfrenta a un rival complicado, BM Sinfín Santander, en el Quijote Arena. A pesar de la presión de tener que estar al tanto de otros resultados, tanto el entrenador como los jugadores subrayan la necesidad de mantener la concentración en su propio juego. El portero Santi Giovagnola destaca la emoción de jugar en casa y la influencia positiva que la afición puede tener en el equipo. La meta de organizar la fase de ascenso es un aliciente que motiva a los jugadores a dar lo mejor de sí en este desenlace de temporada.