Sánchez Requena recuerda a Núñez que «la única condena por corrupción en CLM es para Gómez Gordo, estrecho colaborador de Cospedal» » PSOE de Castilla-La Mancha

Críticas en Castilla-La Mancha: Antonio Sánchez Requena responde a Paco Núñez

El diputado socialista Antonio Sánchez Requena ha lanzado duras críticas hacia el presidente regional del Partido Popular (PP), Paco Núñez, calificando su reciente actitud política como “desesperada”. Las declaraciones de Sánchez Requena en Toledo han surgido como respuesta a los intentos del PP de vincular al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, con Víctor de Aldama.

Sánchez Requena, visiblemente sorprendido, cuestionó los movimientos del PP de Castilla-La Mancha, describiéndolos como “ofensivos”. En sus declaraciones, fue contundente al recordar que “quien sí que está condenado por corrupción es Andrés Gómez Gordo”, quien fuera estrecho colaborador de María Dolores de Cospedal durante su mandato al frente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.

El diputado socialista subrayó que Gómez Gordo, considerado mano derecha de Cospedal, ha sido condenado por malversación, un hecho sobre el cual “el PP no ha pedido ninguna explicación”. En esta línea, lamentó que el partido de la oposición maneje “criterios diferentes según se trate de ellos mismos o de los demás”, lo que, en su opinión, refleja una doble moral.

La reacción de Sánchez Requena considera que el PP está motivado por una “desesperación” que lo lleva a recurrir a cualquier estrategia para intentar deteriorar la imagen del presidente García-Page. Además, cuestionó la credibilidad de Núñez, asegurando que esta “se reduce a cero” debido a sus afirmaciones y actuaciones recientes.

Para concluir, el diputado del grupo socialista reprobó las declaraciones de Núñez, describiéndolas como “absolutamente ofensivas y forzadas”, lo que, según él, evidencia la situación de desesperación en la que se encuentra el presidente del PP en Castilla-La Mancha. De esta manera, el panorama político en Castilla-La Mancha se tiñe de una tensión palpable, no solo por las acusaciones personales, sino también por las profundas diferencias en el manejo de situaciones de corrupción pasada y presente.

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