El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presentado este miércoles su compromiso de elevar la fiscalidad para aquellas personas que ya poseen en sus cuentas bancarias suficiente dinero para vivir «cien vidas». Este anuncio se produjo durante la inauguración del nuevo curso político en un acto celebrado en el Instituto Cervantes, donde Sánchez destacó la necesidad de poner en marcha «nuevas acciones destinadas a acotar privilegios desproporcionados» que benefician a ciertas élites del país.
Durante su discurso, el jefe del Ejecutivo se mostró firme en su intención de gravar fiscalmente a los más acaudalados, señalando que la medida no busca perjudicar a los millonarios, sino proteger a las clases medias y trabajadoras en un sistema que, según su valoración, es «extraordinariamente injusto». Este planteamiento fue respaldado por la presencia de importantes figuras políticas y sindicales, incluidos los líderes de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez.
Sánchez también abordó el compromiso ambiental del Ejecutivo, afirmando que «España será un país mejor» si se incrementa el uso de automóviles eléctricos, fabricados localmente, y se promueve un mayor acceso al transporte público, sugiriendo que es necesario reducir la presencia de vehículos de lujo como los lamborghinis en las calles.
Finalmente, el presidente concluyó reafirmando que una fiscalidad más progresiva será uno de los tres ejes principales de su estrategia económica para el nuevo curso político, destacando que los impuestos «crecerán más para quienes más tienen».
