El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha celebrado la reciente aprobación de la Ley de Amnistía destacando su importancia en el panorama político actual. Durante una rueda de prensa celebrada en Palacio de La Moncloa, donde hizo un balance del curso político, Sánchez ha comentado sobre la posibilidad de que diversas comunidades autónomas recurran la ley ante el Tribunal Constitucional, manifestando su convicción de que estos recursos serán en vano.
«Aquellas comunidades autónomas que van a recurrir ante el Tribunal Constitucional la Ley de Amnistía, en mi opinión van a perder ese recurso», afirmó el jefe del Ejecutivo, mostrando seguridad en la solidez y constitucionalidad de la legislación aprobada.
La respuesta de Sánchez se da en un contexto donde varias comunidades han expresado su rechazo a la ley. Es destacable la posición de Castilla-La Mancha, cuyo gobierno es liderado por el socialista Emiliano García-Page. Esta comunidad autónoma confirmó a través de su Consejo de Gobierno que recurriría la ley ante el alto tribunal.
No solamente Castilla-La Mancha ha mostrado su disposición a impugnar la Ley de Amnistía, sino que se suman otras comunidades gobernadas por el Partido Popular, incluyendo Madrid, Andalucía, Murcia, Galicia y la Comunidad Valenciana, que ya han anunciado en el pasado sus intenciones de recurrir la normativa recién aprobada.
Estas acciones legales previstas reflejan el disenso entre las administraciones regionales y el gobierno central con respecto a esta legislación, evidenciando la polarización política en cuanto a las interpretaciones de la constitucionalidad y el impacto de la nueva ley dentro del marco legal español. Mientras tanto, el gobierno se muestra confiado en que el Tribunal Constitucional ratificará la validez de la Ley de Amnistía frente a los recursos anunciados.