El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha celebrado la aprobación definitiva de la ley de amnistía en el Congreso de los Diputados, destacándola como un logro significativo del «avance social y la convivencia» frente a lo que consideró «los pactos de la derecha y la ultraderecha», refiriéndose explícitamente al PP y Vox. En un mitin llevado a cabo en Barakaldo (Bizkaia), Sánchez apoyó firmemente a la candidata socialista Teresa Ribera, enfatizando que el voto al PSOE es «el único» capaz de frenar al «bloque reaccionario».
Sánchez defendió la ley de amnistía como una estrategia clave para la «convivencia» y superación de «la mayor crisis territorial en la historia de nuestra democracia en Cataluña», provocada por el desafío independentista del 1-O. De acuerdo con el presidente, esta ley es prueba de que «España está más unida y es más próspera» en comparación con la época en que gobernaba el PP. La ley de amnistía, después de un complicado pasado por el Senado hasta su aprobación en la Cámara Baja, ha logrado el apoyo del bloque de la investidura frente a la oposición de la derecha.
Durante el proceso de votación de la ley en el Congreso, se vivieron momentos de tensión, con insultos hacia la bancada socialista y gritos de «traidor» dirigidos a Sánchez. El presidente reflexionó sobre cómo sería el país bajo un gobierno de Feijóo y Abascal, pronosticando una «confrontación permanente».
Sánchez además alegó que su partido es blanco de ataques por parte de la «internacional ultraderechista», afirmando que «solo el PSOE puede frenarles» y criticó la falta de diferenciación entre el PP y Vox, sugiriendo que votar por uno es como votar por el otro.
La ley de amnistía y el reconocimiento del Estado palestino por parte del Consejo de Ministros fueron otros de los logros resaltados por Sánchez, quien posicionó estos actos como ejemplos de su gobierno abriendo camino para España en Europa y diferenciándose de las posturas sugeridas como violentas de la ultraderecha, especialmente en el conflicto de Gaza.
De cara a las elecciones europeas, a pesar de que las encuestas posicionan al PP por delante del PSOE, Sánchez realizó una apasionada comparación de la situación económica de España con la carrera de la cantante Taylor Swift, proyectando una imagen de fortaleza y progreso continuo.
Finalmente, Sánchez planteó los diversos escenarios políticos que enfrentará España en las elecciones del 9 de junio, instando a los votantes a elegir entre «justicia social o Javier Milei; paz o Netanyahu; convivencia o Isabel Díaz Ayuso; y juego limpio o Feijóo», y llamó a apoyar a Teresa Ribera para propiciar una «remontada» del PSOE en las urnas, mientras que Ribera misma advirtió sobre las consecuencias negativas de una potencial victoria de PP y Vox en Europa.