Durante su intervención en un evento en la factoría de Airbus en Albacete, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha destacado los recientes logros en materia de empleo en España. Ha señalado el descenso de la tasa de desempleo y una notable subida en el número de afiliados a la Seguridad Social, al término de junio, como motivos de orgullo para su administración.
Sánchez ha alabado que el desempleo continúa en una trayectoria descendente y ha manifestado su entusiasmo respecto a que el número de trabajadores en España ronda la cifra de 21,4 millones, una cantidad que califica de «casi imposible». Esto plantea, según sus palabras, «la mayor cifra de empleo de la historia» del país.
El presidente ha llamado la atención sobre el hecho de que nunca antes tantas personas habían estado empleadas en España y ha destacado que los niveles de temporalidad en el empleo han alcanzado mínimos, hecho que atribuye a los cambios introducidos con la reciente reforma laboral. Además, ha señalado con satisfacción que inéditamente más de 10 millones de mujeres se encuentran cotizando y que el país disfruta de unas «altas tasas de crecimiento».
Sánchez ha enfocado parte de su discurso en recalcar el impacto positivo de estos avances laborales en la transformación del modelo productivo de España, así como en la reducción del déficit y la deuda públicos. Subraya que estos progresos se han llevado a cabo conjuntamente con un «refuerzo de los servicios públicos».
Para concluir su participación, el presidente ha puesto en relieve la posición destacada de España en el contexto económico europeo, aludiendo a estas mejoras laborales como las «credenciales» que sitúan a la nación como líder en el crecimiento de las grandes economías del continente, así como en la generación de empleo, al representar la creación de cuatro de cada diez nuevos puestos de trabajo en Europa.
