En un evento solemne y cargado de simbolismo, el concejal más joven de la Corporación, Héctor Serrano García, ha desempeñado un papel crucial en una de las ceremonias más significativas de la localidad. Portando el símbolo de la conquista, Serrano García llevó la insignia desde las puertas del Ayuntamiento hasta el templo catedralicio, marcando así el inicio de una celebración que combina fe y tradición.
En la catedral se ha celebrado una eucaristía conmemorativa que congregó a varios dignatarios y miembros de la comunidad. Tras la liturgia religiosa, la comitiva, con paso firme y respetuoso, se dirigió hacia la emblemática estatua de Alfonso VIII, lugar donde tendría lugar uno de los rituales más esperados: la Ofrenda Floral.
Dicho acto fue encabezado por el alcalde, Darío Dolz, quien estuvo acompañado por figuras representativas de la vida social y cultural de la ciudad. Junto a él, Mario Pinós, presidente de la Asociación de Peñas Mateas, y la pregonera de honor, Laura García Melero, depositaron las flores a los pies del ilustre monarca, simbolizando así la gratitud y el recuerdo a la figura histórica que juega un papel tan central en la identidad de la comunidad.
El acto no solo rememora el pasado y honra la memoria histórica, sino que también refuerza el sentido de unidad y pertenencia entre los ciudadanos. Año tras año, la Ofrenda Floral se ha convertido en un punto de encuentro donde se celebran las raíces comunes y se fomenta el orgullo por el legado cultural.
La participación activa de las autoridades, junto a la implicación de las asociaciones y la comunidad en general, hace de esta ceremonia un evento destacado en el calendario local, mostrando que la historia sigue viva en las tradiciones y en el corazón de sus habitantes.
