Un ataque de drones suicidas lanzado por Rusia ha golpeado severamente el puesto de control internacional de Orlivka en la región de Odesa, cerca de la frontera con Rumanía. Este ataque, ocurrido durante la noche, ha llevado al Servicio de Aduanas de Ucrania a suspender temporalmente las operaciones en el área, afectando directamente la infraestructura del complejo de ferris.
La situación es crítica, ya que el bombardeo ha causado daños significativos, y el puesto de control se ha visto obligado a cerrar sus puertas de manera provisional. Las autoridades ucranianas han comunicado que están trabajando intensamente para reparar los daños y restablecer las funciones lo antes posible, en un contexto donde la seguridad en las fronteras se vuelve aún más importante.
Este incidente resalta la continua tensión en la región, a medida que las fuerzas rusas intensifican sus ataques. La comunidad local, ya golpeada por el conflicto, enfrenta nuevos desafíos ante esta amenaza, mientras el país busca adaptarse a una situación de inseguridad persistente.
Artículo resumido que puedes leer completo aquí

















