Rusia ha afirmado haber neutralizado 77 drones de ala fija lanzados desde Ucrania durante la noche, en lo que se considera un aumento significativo de la actividad aérea en el conflicto en curso. Según el Ministerio de Defensa ruso, las interceptaciones afectaron a siete regiones del país, destacando Volgogrado y Rostov, donde se derribaron 34 y 23 drones, respectivamente. Los informes no han detallado sobre posibles daños o víctimas en las operaciones de defensa.
La actividad también se extendió a regiones cercanas a la capital, Moscú, así como a Kaluga, Bélgorod y Voronezh. En las aguas del mar Negro y el mar de Azov, los sistemas de defensa rusos lograron abatir cuatro drones adicionales. Estas incursiones se alinean con las afirmaciones rusas de que los ataques aéreos ucranianos están dirigidos a interrumpir la producción de hidrocarburos en su territorio y perturbar las operaciones logísticas de sus fuerzas militares.
En la jornada anterior, Rusia reportó haber derribado un total de 141 drones, destacando el país fronterizo de Briansk como el objetivo de 62 de estos ataques. A medida que el conflicto se intensifica, el uso de drones en el teatro de operaciones se ha convertido en una herramienta clave en las estrategias de ambas partes, lo que plantea un nuevo horizonte en la guerra moderna.
Artículo resumido que puedes leer completo aquí

















