La Audiencia de Barcelona ha dado la razón a Rosa Peral, la exoficial de la Guardia Urbana condenada por asesinato, en su disputa legal contra Netflix por la serie «El cuerpo en llamas», que trata sobre su caso. Peral había solicitado ante la justicia la paralización de la producción de la serie, con el argumento de que se debía revisar el contenido antes de su emisión para asegurar la protección del derecho al honor de sus hijas menores. Como resultado de esta resolución, el juzgado ahora debe considerar la posibilidad de imponer medidas cautelares para detener la emisión de la serie, después de reconocer la falta de una audiencia preliminar que incluyera a todas las partes implicadas.
Esta decisión no solo reabre el caso en el ámbito judicial en el juzgado de Vilanova, sino que también destaca la tensión existente entre los derechos de autor y los derechos individuales en las producciones basadas en hechos reales. Con la serie ya estrenada y habiendo alcanzado popularidad, ello podría significar una compensación por parte de Netflix y los productores de la serie hacia Peral, debido al impacto mediático generado por la misma, que ha sido significativo.
La defensa de Rosa Peral está evaluando pedir una compensación por daños morales debido a la exposición mediática resultante. Este caso pone de relieve la necesidad de un equilibrio entre la creatividad artística y la responsabilidad ética, especialmente en la representación de personas reales en plataformas de amplio alcance como Netflix. La situación subraya cómo el crecimiento de las plataformas de streaming, al explorar casos reales para sus contenidos, plantea nuevos retos en cuanto a mantener un balance justo, recalculado la importancia de procedimientos legales justos y considerados que defiendan los derechos de todos los implicados.