En Guadalajara, la Guardia Civil ha realizado un importante hallazgo relacionado con el triple crimen de Chiloeches: objetos de valor pertenecientes al matrimonio de 52 años y su hija de 23 años, asesinados recientemente, han sido encontrados entre las pertenencias de los detenidos por el caso. Estos objetos, entre los que se incluye una pulsera tipo esclava de la familia, fue descubierta durante uno de los registros en los domicilios de los arrestados. Este descubrimiento refuerza la hipótesis del robo como móvil de los asesinatos.
Las víctimas, encontradas en su vivienda de la urbanización Medina Azahara, presentaban signos de violencia y la casa fue posteriormente incendiada. Tres individuos han sido detenidos en relación con estos acontecimientos y ya han sido puestos a disposición judicial este martes.
Las fuentes del caso indican que uno de los arrestados, un joven de unos veinte años con antecedentes por robo con fuerza y estafa, podría estar detrás del brutal crimen. El joven, identificado como F.P.S. y nacido en 1999, residía en Pioz, una localidad cercana a Chiloeches.
Junto a él, otros dos individuos han sido detenidos: un hombre sospechoso de haber actuado como cómplice y una mujer acusada de encubrimiento. Las diligencias han llevado a cabo tres registros en total, dos en Pioz (Guadalajara) y uno en Daganzo de Arriba (Madrid).
La investigación sigue abierta y ahora se centra también en la conexión entre los detenidos y un exnovio de la hija fallecida, de 22 años. La Guardia Civil busca esclarecer la dinámica de la relación entre estas personas.
Los detenidos fueron trasladados desde la Comandancia de Guadalajara, donde habían estado retenidos desde el domingo, para la práctica de diversas diligencias y la reconstrucción de los acontecimientos que culminaron en el trágico suceso.
La Delegación del Gobierno había anunciado previamente que varias personas fueron arrestadas en relación al descubrimiento de los cuerpos por parte de los bomberos de Azuqueca de Henares, tras sofocar las llamas de una casa en la calle Fuente Valdoma. Para preservar la investigación, el Juzgado de Instrucción número 4 de Guadalajara ha decretado el secreto de las actuaciones.