Una semana después del devastador impacto de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que azotó Valencia y Albacete, dejando tras de sí un rastro de destrucción y desolación, el programa televisivo «Demos: el gran sondeo», conducido por Risto Mejide, ha dedicado una emisión especial para dar voz a aquellos directamente afectados por esta catástrofe natural. En una muestra de solidaridad y reconocimiento, la producción invitó a 44 individuos que vivieron en carne propia las consecuencias de las riadas, permitiéndoles compartir sus historias y vivencias frente a la audiencia nacional.
Risto Mejide, con su gesto ya habitual de confrontación a la realidad, comenzó el programa con una declaración inesperada, señalando el simbolismo de las botas llenas de barro que portaban algunos de sus invitados. «No ha sido cosa nuestra, ha sido porque ellos han querido que esas botas les representen», explicó, subrayando que la presencia del barro no era un elemento escenográfico, sino un testimonio genuino del desastre vivido. Esta declaración adquiere un matiz aún más significativo en el contexto de recientes controversias que han rodeado a Mediaset, incluyendo el cuestionamiento de ciertas prácticas periodísticas dentro de la cadena.
El episodio reciente en el que Rubén Girbert, colaborador del programa «Horizonte» de Iker Jiménez, confesó haber dramatizado sus intervenciones desde una zona afectada en Valencia al mancharse de lodo, ha intensificado el escrutinio público hacia la cadena. En respuesta, Mejide quiso marcar una distinción clara, acentuando la autenticidad de la representación del desastre en su programa.
Entre los momentos más emotivos del programa se destacó la intervención de una voluntaria de Valencia, Miriam, quien partició en las labores de ayuda en Algemesí. Al mostrar sus botas manchadas en directo, Miriam subrayó que este gesto iba más allá de lo simbólico; era un llamado urgente a la solidaridad y al envío de ayudas a las «zonas cero» del desastre. Su testimonio puso de manifiesto no solo la devastación sufrida, sino también el espíritu de comunidad y resiliencia que emerge en tiempos de crisis.
La emisión especial de «Demos: el gran sondeo» ha logrado sacar a la luz las historias humanas detrás del desastre, ofreciendo una plataforma para que las voces de los afectados resuenen a lo largo y ancho del país. En una industria mediática a menudo criticada por su sensacionalismo o distorsión de los hechos, la decisión de Mejide y su equipo de abordar la tragedia desde una perspectiva auténtica y respetuosa merece ser destacada. La tragedia de la DANA en Valencia y Albacete, a través de este programa, se ha convertido en un recordatorio de las adversidades que como sociedad podemos enfrentar, pero también de la fortaleza y el apoyo mutuo que emerge en respuesta a estas.