Este miércoles, la Asociación de la Prensa de Madrid fue escenario de un emotivo homenaje al periodista Ricardo Ortega, asesinado en Haití hace 20 años. El acto contó con la presencia de numerosos profesionales del periodismo que llenaron el salón de actos, recordando a Ortega como un luchador contra la mentira y pionero en su estilo periodístico.
Durante el evento, María Rey, presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid y moderadora del coloquio, destacó la trascendencia de Ricardo Ortega para el periodismo, subrayando cómo su legado sigue vivo incluso para aquellas generaciones de estudiantes que no llegaron a conocerle personalmente.
Los compañeros de Ortega no pasaron por alto los episodios que marcaron su carrera, incluida la polémica injerencia política que le costó su puesto como corresponsal en Nueva York de Antena 3, y su trágica muerte a manos del ejército estadounidense durante el golpe de Estado en Haití, cuando intentaba asistir a un colega herido.
El acto también sirvió para repasar las destacadas coberturas de Ortega desde su corresponsalía en Moscú para Agencia EFE hasta las guerras de Chechenia, donde realizó reportes fundamentales para entender el ascenso de Putin. Su honestidad y rigor periodístico también quedaron patentes en sus crónicas desde Estados Unidos y Afganistán, donde negó la existencia de armas de destrucción masiva por parte de Saddam Hussein y reveló su relación con Osama Bin Laden.
Al relatar anécdotas y experiencias vividas junto a Ortega, sus colegas pusieron énfasis en su capacidad de contar historias con gran detalle e independencia, cualidades que, según ellos, le acarrearon problemas con las autoridades, especialmente cuando el gobierno de José María Aznar presionó para que fuera retirado de su puesto en Nueva York.
El homenaje también se extendió a una mesa redonda en la que intervinieron personas como Juan Pedro Velázquez Gaztelu y Corina Miranda, quienes describieron a Ortega como alguien que poseía una gran virtud para captar y mantener la atención del público, así como para contrastar hechos e ir más allá de la superficialidad.
La muerte de Ortega fue recordada como un acto todavía impune, un tema que sigue generando indignación entre los presentes. La investigación realizada por Antena 3 en aquel entonces concluyó que fue un disparo de las tropas norteamericanas lo que acabó con su vida.
El coloquio finalizó subrayando la «rebelión contra la mentira» que Ortega ejemplificó en su trabajo diario, siendo su legado una fuente de inspiración para combatir la falsedad y buscar la verdad. Para cerrar el encuentro, María Rey anunció la creación de un monumento en la sede de la asociación para honrar a todos los periodistas que han perdido la vida en el ejercicio de su profesión, así como la intención de ofrecer apoyo a los reporteros ‘freelance’ que trabajan en condiciones a menudo precarias y sin garantías.