Desde la Asociación de Municipios Ribereños de Entrepeñas y Buendía, su presidente, Borja Castro, ha manifestado su optimismo ante las expectativas para el verano, que califica de «muy buenas». Castro también ha expresado su solidaridad con las localidades de la provincia que están enfrentando complicaciones derivadas de un exceso de precipitaciones, como la salida de cauce de los ríos y la necesidad de gestionar la capacidad de las presas.
En contraste, en la comarca de Entrepeñas y Buendía, los embalses han alcanzado niveles que superan los 1.200 hectómetros cúbicos, lo que ha generado un ambiente de alivio entre los lugareños y los negocios de la zona. Castro, que también es alcalde de Alcocer, asegura que estas lluvias permiten «respirar» ante la tranquilidad de que, cuando cesen las precipitaciones, habrá agua suficiente en los embalses para afrontar la temporada estival.
La buena situación de los pantanos se visualiza como un aliciente para fomentar el turismo y asentar más población en los pueblos. En este contexto, el presidente considera fundamental «aprovechar» este ciclo húmedo para gestionar de manera diferente y estabilizar la lámina de agua, sugiriendo elevar los límites no trasvasables, lo que animaría a las empresas a «poner el ojo» en sus localidades y contribuir al desarrollo económico.
La esperanza se palpa entre algunos negocios dedicados al turismo en la comarca, pues los niveles de los pantanos se mantienen alrededor del 50% de su capacidad. Castro recuerda que las imágenes actuales en Entrepeñas y Buendía no se daban desde 1998, cuando se realizó el último trasvase interno entre ambos pantanos.
En los últimos días, la presencia de curiosos que se acercan a las presas también ha sido notable, augurando un verano favorable para disfrutar de la zona durante los fines de semana. Los alcaldes han encontrado en la opinión de los propietarios de negocios de la región el mejor indicador de la situación, recibiendo informes positivos sobre el impacto que la buena gestión del agua tiene en el aumento del atractivo turístico, el consumo y las licencias de obras en los pueblos cercanos. «Lo que nos dicen es muy bueno», concluye Castro, subrayando la importancia de la gestión del agua para el futuro de estas localidades.