El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, ha trasladado a la vicepresidenta Tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, el reto de solucionar el nuevo modelo de financiación autonómico y de las corporaciones locales para avanzar en las políticas de lucha contra la despoblación. El objetivo es que estas medidas se mantengan en el medio y largo plazo, y que sean lo suficientemente flexibles para adaptarse a los cambios.
Castilla-La Mancha destina el 25% de su techo de gasto a medidas contra la despoblación y el 3,6% de su Producto Interior Bruto (PIB) va destinado a estas políticas. Además, el Gobierno regional ha ampliado este año las medidas fiscales para zonas en riesgo de despoblación. Por otro lado, el Gobierno central ha puesto en marcha 130 medidas, entre ellas el plan de competencias digitales dotado con 90 millones para comunidades autónomas y 30 para el tejido social, o el plan de eficiencia energética y energías renovables en estos pequeños municipios.
La ministra Ribera ha animado a trabajar en políticas contra la despoblación desde la «España de la acción» y no desde el «victimismo». Así mismo, el secretario general de la FEMP, Carlos Daniel Casares, ha pedido referirse al mundo rural como el «mundo de las oportunidades». El presidente de la Diputación de Albacete, Santiago Cabañero, ha apostado por tratar la problemática desde la esperanza y el alcalde de Albacete, Emilio Sáez, ha defendido el derecho a tener las mismas oportunidades vivan donde vivan.
Es por ello que se necesita una agenda común entre las cinco diputaciones provinciales para sacar mayor rentabilidad a los recursos públicos frente a la despoblación, así como una cogobernaza entre administraciones para garantizar la cohesión social y territorial. La vicepresidenta primera de las Cortes de Castilla-La Mancha, Josefina Navarrete, ha puesto en valor la región como punta de lanza en materia de despoblación. Por tanto, se trata de combatir la despoblación desde un planteamiento analítico con el apoyo cerrado de las administraciones.