En las últimas semanas, numerosos entusiastas de la jardinería han manifestado su inquietud respecto al estado de sus Monsteras, una planta admirada por su belleza y facilidad de cuidado. La experta en jardinería, Ana López, ha ofrecido consejos prácticos para revitalizar estas plantas que exhiben signos de deshidratación, tales como bordes marrones y hojas marchitas.
Durante una reciente charla en un centro de jardinería local, López subrayó que, aunque la Monstera no es particularmente demandante, sí requiere atención en cuanto a su riego y condiciones ambientales. «Lo primero que se debe hacer al observar que una Monstera tiene bordes marrones es evaluar su nivel de hidratación», afirmó la especialista. Según ella, el problema comúnmente radica en un riego inadecuado.
Resucitar una Monstera dañada puede ser asombrosamente rápido, afirmó López. «Si la planta está seca, la hidratación es clave. Sumergir la maceta en agua durante unos minutos permite que el sustrato absorba la humedad de manera efectiva», explicó. También sugirió el uso de fertilizantes equilibrados para revitalizar la planta, proporcionando nutrientes esenciales que pueden haberse reducido debido al estrés.
La ubicación de la planta es otro factor crucial, destacó López. La Monstera prospera en ambientes cálidos con luz indirecta. «Si está expuesta a la luz solar directa, puede sufrir quemaduras en las hojas. Encontrar el lugar adecuado puede marcar la diferencia en su recuperación», señaló.
Finalmente, la experta recomendó a los propietarios de estas plantas establecer un calendario de riego regular, evitando el encharcamiento para prevenir la pudrición de las raíces. «Una planta feliz es una planta saludable», concluyó López, invitando a los cuidadores a observar las señales de su Monstera como una manera de fortalecer el vínculo con su verde compañera en casa.