Las autopsias realizadas a los cuerpos encontrados en una vivienda del Casco de Toledo el pasado martes han confirmado que las víctimas fallecieron debido a una intoxicación por monóxido de carbono. Fuentes de la Delegación del Gobierno comunicaron a Europa Press que entre los fallecidos se encuentran una mujer española de 46 años, un hombre español de 56, un hombre con doble nacionalidad, británica y española, de 58 años, y un ciudadano rumano de 64 años.
Estas revelaciones se han hecho tras la identificación de los cadáveres y constituyen un avance significativo en la investigación de los hechos. Mientras tanto, el Instituto Médico Forense prosigue con las autopsias restantes, en un esfuerzo por completar el cuadro de circunstancias que rodearon la tragedia. Las autoridades continúan recabando información y realizando las diligencias necesarias para determinar las causas exactas que condujeron a la presencia de monóxido de carbono en la vivienda, sustancia que es conocida por ser un gas tóxico y letal cuando se acumula en espacios cerrados sin ventilación adecuada.