La Residencia Social Asistida San José en Toledo, conocida por ser un referente en la atención a la tercera edad, está a punto de ampliar sus servicios con la creación de una unidad de cuidados paliativos y otra de neurorrehabilitación. Daniel Arias, vicepresidente de la Diputación de Toledo y responsable de Bienestar Social y Familia, ha compartido con Europa Press planes para la mejora y ampliación de esta infraestructura sociosanitaria.
En el espíritu de renovación, se llevan a cabo reformas importantes, que incluyen la rehabilitación de viviendas y un consultorio en la que fue la Unidad de Conductas Adictivas (UCA). Además, se mejorarán los comedores del pabellón número 2, con el objetivo de optimizar la calidad de vida de los residentes. Estas medidas vienen a rectificar la situación previa de cierto abandono, señalada por Arias, que la actual gestión se propuso remediar tras hallar pabellones con goteras y comensales en los pasillos.
Tomando en consideración a personas en situación de especial vulnerabilidad, se planea dedicar las antiguas viviendas de la UCA para ofrecer asistencia a mujeres embarazadas sin recursos y para cooperar con diversas asociaciones. El ambicioso proyecto tiene como finalidad transformar la residencia en un espacio abierto que brinde apoyo no solo a ancianos, sino también a mujeres, personas con discapacidades, enfermos terminales y jóvenes. Todo esto se logrará sin necesidad de aumentar significativamente el personal, aunque se realizarán contrataciones de profesionales como psicólogos, trabajadores sociales y fisioterapeutas para los nuevos servicios.
Arias refiere a la residencia como «la joya de la corona» de la Diputación, no solo por su infraestructura sino también por el orgullo que representa para los empleados y la institución. Actualmente cuenta con un equipo de 400 profesionales que atienden a 296 ancianos, y se espera incrementar esta cifra en 30 residentes a corto plazo.
En un tono crítico hacia la anterior corporación, Arias denuncia una herencia de abandono y dejadez. Esta circunstancia ha requerido de un esfuerzo considerable para comenzar de cero con reformas estructurales. No obstante, se ve compensado por la satisfacción expresada por los familiares de los residentes, quienes han agradecido públicamente el trato humano y cercano proporcionado por la residencia.
La Residencia Social Asistida San José maneja un presupuesto anual de 24 millones de euros, de los cuales la mayor parte se destina a los salarios del personal. Con los cambios y ampliaciones previstos, Daniel Arias y su equipo aspiran a establecer un modelo ejemplar de cuidado en la región de Castilla-La Mancha.
