En un giro inesperado que sacude el escenario político alemán y europeo, el partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) ha decidido tomar medidas drásticas ante la controversia generada por su líder para las elecciones europeas, Maximilian Krah. A tan solo dos semanas para la cita electoral, AfD ha prohibido cualquier aparición pública de Krah, en respuesta a sus controvertidas declaraciones sobre las Schutzstaffel (SS), la organización paramilitar asociada con Adolf Hitler y el régimen nazi.
Según informes del diario Bild, el comité federal de AfD ha optado por esta decisión tras analizar las recientes declaraciones de Krah, quien pidió que no se califique indiscriminadamente a los miembros de las SS como criminales. Krah, enfrentando críticas internas y externas, ha anunciado a través de sus redes sociales su intención de abstenerse de futuras apariciones públicas durante la campaña electoral, además de renunciar a su puesto en el comité federal, lo cual podría dejar a AfD sin una figura de liderazgo claro en un momento crítico.
«La AfD debe mantener su unidad. Por esta razón, me abstendré de hacer más apariciones en la campaña electoral con efecto inmediato y dimitiré como miembro del comité ejecutivo federal», expresó Krah, señalando su deseo de evitar más distracciones en un período electoral clave para el partido.
La decisión llega un día después de que figuras prominentes de la derecha europea, como Marine Le Pen de la Agrupación Nacional (AN) de Francia y Matteo Salvini de la Liga italiana, anunciaran su ruptura con AfD en el Parlamento Europeo debido a las mencionadas declaraciones. El distanciamiento de AfD por parte de estos líderes refleja el creciente aislamiento del partido alemán en el contexto de la política continental.
Krah se había visto previamente en el centro de otra polémica en abril, relacionada con la implicación de uno de sus asesores en un supuesto caso de espionaje para China. Ahora, su defensa de las SS ha sido la gota que colmó el vaso, llevando a AfD a una situación sin precedentes de tener que limitar las apariciones de uno de sus líderes más visibles.
Además de Krah, el número dos de la lista europea de AfD, Petr Bystron, también se mantendrá alejado del ojo público, a medida que avanzan las investigaciones en su contra por presunto soborno y blanqueo de capitales. La serie de controversias y escándalos legales plantea serias preguntas sobre la dirección que tomará la campaña electoral de AfD y su futuro político inmediato.
En un momento en que la política europea está más polarizada que nunca, el auto-silenciamiento de líderes de un partido tan prominente como AfD es indicativo de las tensiones internas que atraviesa la extrema derecha en el continente. Con las elecciones europeas a la vuelta de la esquina, el impacto de estas decisiones y controversias en las urnas está aún por verse.
