Desde principios de la década de los 90, el baño de una familia en el barrio de Salamanca, Madrid, había permanecido inalterado. Con sus baldosas color salmón y accesorios dorados ligeramente envejecidos, el cuarto de baño personificaba el estilo de una época pasada. Sin embargo, gracias a una reforma reciente que se ha realizado sin obras y que ha sorprendido a muchos, este espacio ha resurgido como uno digno de portada en revistas de diseño.
La propietaria, Ana Ruiz, decidió que era hora de actualizar el baño, pero el presupuesto y el temor a las complicaciones de una reforma integral la detuvieron. Fue entonces cuando descubrió una tendencia en auge: reformas sin obras, utilizando vinilos, pintura especial para azulejos y cambios de accesorios. Inspirada por las ideas encontradas en redes sociales y tutores de YouTube, Ana se embarcó en un proyecto que ha alcanzado gran popularidad en internet.
La primera transformación fue cambiar los azulejos salmón por un tono blanco nítido usando pintura especial. «El cambio fue inmediato,» comenta Ana con entusiasmo. «El blanco aporta una sensación de amplitud y limpieza que antes no existía.» Para complementar el nuevo color de las paredes, se decidió a colocar vinilos adhesivos con motivos geométricos en el suelo, dándole un aire fresco y moderno.
Los detalles dorados se actualizaron con un spray de pintura en un tono negro mate, logrando un contraste sofisticado sin el costoso reemplazo de grifería y tiradores. Además, Ana incorporó algunos elementos decorativos como plantas artificiales, espejos con bordes dorados y estanterías flotantes, logrando un equilibrio perfecto entre lo moderno y lo acogedor.
El proyecto, documentado paso a paso en sus redes sociales, capturó la atención de miles de seguidores, quienes siguieron el proceso con entusiasmo y admiración. «No podía creer lo fácil que era hacer estos cambios,» relata Ana. «Es increíble lo accesible que puede ser transformar un espacio con un poco de creatividad y recursos simples.»
El baño, que una vez fue un ejemplo nostálgico de los años 90, ha sido transformado en un espacio chic y moderno, digno de la portada de cualquier revista de diseño de interiores. Esta reforma sin obras no solo ha logrado un cambio estético impresionante, sino que también ha inspirado a muchas otras personas a considerar la renovación de sus propios hogares de manera accesible y efectiva. Ana Ruiz no solo actualizó su baño, sino que también demostró que con un poco de ingenio y esfuerzo, es posible lograr grandes cambios sin necesidad de grandes inversiones.
