En una reciente declaración, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha manifestado de manera enfática su posición frente a la actual crisis con Hamás, señalando un ultimátum decisivo: la liberación de todos los rehenes israelíes antes del mediodía del sábado. De no cumplirse esta condición, el cese al fuego que hasta el momento ha prevalecido será dado por terminado, marcando el reinicio de las hostilidades por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) hacia la Franja de Gaza.
Este martes, a través de un mensaje divulgado en sus redes sociales, Netanyahu comunicó su firme resolución después de una reunión con su gabinete de seguridad. La advertencia surge tras evidenciar el deterioro en la salud -tanto física como psicológica- de tres rehenes recientemente liberados por Hamás, situación que supuestamente refleja un incumplimiento por parte del grupo islamista de los acuerdos previamente establecidos. En respuesta, Israel se prepara con la movilización de reservistas, anticipándose a diversos escenarios que podrían desencadenarse a partir de ahora.
El gobierno de Israel ha expresado su descontento con la pausa anunciada por Hamás en la entrega de futuros rehenes. Un acto que, según Netanyahu, muestra falta de compromiso por parte del movimiento palestino con el acuerdo de alto el fuego alcanzado a mediados de enero, que contemplaba la liberación de 33 rehenes israelíes a cambio de la liberación de cientos de presos palestinos detenidos en Israel.
La escalada de tensiones viene después de un devastador ataque lanzado por Hamás el 7 de octubre de 2023, resultando en la muerte de 1,200 israelíes y la captura de otros 240 como rehenes. La consecuente respuesta militar de las FDI ha llevado a una sobrecogedora pérdida de vidas en la Franja de Gaza, donde más de 48,000 personas, incluyendo miles de miembros de Hamás, han perdido la vida.
La situación se complica aún más con las recientes declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha exigido la inmediata liberación de todos los rehenes israelíes, al tiempo que ha presentado una «visión revolucionaria» para el futuro del territorio de Gaza, sugiriendo incluso la construcción de un complejo residencial en la zona.
Con el reloj en cuenta regresiva hacia el plazo fijado por Netanyahu, la comunidad internacional mira con preocupación el posible reinicio de las hostilidades entre Israel y Hamás, esperando que una solución pacífica pueda ser alcanzada antes de que expire el ultimátum. La situación en Medio Oriente continúa siendo crítica, con el destino de numerosas vidas pendiendo de un delicado equilibrio.
