En un mensaje conjunto con motivo del Miércoles de Ceniza, el presidente y la primera dama han hecho un llamado a la oración y la reflexión, uniéndose a los millones de católicos y cristianos en Estados Unidos que inician la temporada de Cuaresma. Este período, que se extiende por 40 días, tiene como objetivo espiritual prepararnos para la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, un pilar central en la fe cristiana.
La Cuaresma es un tiempo de introspección y renovación en el que los fieles se comprometen a practicar la oración, el ayuno y la limosna. La simbología del Miércoles de Ceniza, con la imposición de cruces de ceniza en la frente, sirve como un recordatorio de la mortalidad humana y la necesidad constante de experimentar la misericordia y el amor redentor de Cristo.
En su mensaje, el presidente y la primera dama instan a los ciudadanos a reflexionar sobre el sacrificio de Jesús, enfatizando la importancia de preparar el alma para la llegada de la gloria de la Pascua. Durante esta temporada, que invita a la comunidad a una mayor conexión con su fe, se enfatiza el deseo de que cada persona encuentre un camino hacia la renovación espiritual.
Finalmente, ofrece sus mejores deseos para una Cuaresma enriquecedora y llena de oración, culminando con una bendición para el país en su conjunto. Este mensaje se inscribe en una tradición que busca no solo fortalecer la fe individual, sino también fomentar un sentido de unidad y propósito colectivo entre los estadounidenses.
Fuente: WhiteHouse.gov